Espada de frontón y punta de lanza que lleva adherido un cuchillo afalcatado procedente de Castillejo de los Baños, Fortuna. Siglo V-IV a.C. Museo Arqueológico de Murcia.
Fortuna a través de la historia
Fortuna como tal, tiene una antigüedad de al menos 2000 años, constatada por la existencia de vestigios romanos encontrados en la Cueva Negra (santuario romano) y en Los Baños de Fortuna (balneario romano). Además, cuenta con la presencia de yacimientos iberos en la pedanía de Caprés, el Castillejo y el Cortao de las Peñas.
Se puede fijar, por tanto, el origen de Fortuna en la época romana y desde entonces el municipio abandera el mismo nombre y es más que probable que en el templo romano descubierto en el primitivo manantial fuera venerada la diosa Fortuna.
Tras la conquista de la villa por los árabes, estos perpetuaron el uso de sus aguas dejando su huella inconfundible en el Castillico de los Moros o Torre Vieja, situado a 1,6 km al sur de Fortuna.
Lo cierto es que son pocos los datos fiables que sirven para reconstruir su historia al cien por cien, durante un largo periodo. En 1728 aparece mencionada en unos documentos de Felipe V y es a partir de entonces cuando su discurrir histórico se consolida y su historia circula pareja a la de sus baños termales.
Carta Puebla de Fortuna, testimonio notarial de la concesión del villazgo o jurisdicción real realizada en 1628, por Real Provisión de Felipe IV en la que concede independencia y término propios a favor de los moradores de Fortuna.
Fachada y porticos del casino de Fortuna, con jóvenes admirando un coche.